
En el Jardín del Edén, “Y mandó Jehová Dios al hombre diciendo: “De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás, porque el día que de él comieres, ciertamente morirás”(Génesis 2:16, 17). Eva fue engañada por la serpiente y desobedeció las instrucciones claras de Dios. Adán también comió la fruta y ambos se separaron de Dios. “El pecado es la transgresión de la ley,” por lo tanto, la muerte y la decadencia se convirtieron en el destino de todos los hijos de Adán y Eva. A través de Su amor divino, Jesús, el Redentor, el poderoso Dios, el Padre eterno, condescendió en venir a este mundo, tomó la naturaleza humana para redimir al hombre y colocarlo, una vez más, en armonía con Dios. “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado: y el principado sobre su hombro; y su llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de la paz “(Isaías 9:6). Jesús se convirtió en el puente que nos permite volver hacia Dios. Si el hombre por la fe aceptar el sacrificio de Jesús en la cruz como sustituto de su muerte, entonces, puede convertirse nuevamente en un hijo de Dios.
Durante su vida en esta tierra, Jesús realizó poderosos milagros, y el mayor de todos ellos fue lograr que Lázaro volviera a vivir después de estar muerto durante cuatro días. Jesús dijo que Lázaro estaba durmiendo y él iba a despertarle. Jesús llamó a la muerte “dormir”. ¿Por qué? Porque los que están eventualmente dormidos se levantarán cuando Jesús regrese a la tierra.
“Yo soy la resurrección y la vida”, dijo Jesús a Marta. “Jesús le dijo:-Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque estuviera muerto, vivirá” (Juan 11:25). Esta declaración garantiza a los cristianos a través de las edades que ellos también resucitarán y despertarán de su polvoriento lecho de muerte, si han puesto su confianza en Cristo.
“Hermanos, no queremos que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los que no tienen esperanza. Creemos que Jesús murió y resucitó, y que Dios traerá con Jesús a los que durmieron en él. (1 Tesalonicenses 4:13, 14). Este versículo representa la muerte como un sueño, y todos los que están en la tumba despertarán de nuevo por la voz de Jesús llamándolos desde las nubes del cielo (Juan 5:25, 28, 29; 1 Tesalonicenses 4: 16.17).
En Daniel 12:2 se menciona a las personas durmiendo “en el polvo de la tierra” o en la tumba. En la muerte, todos los justos y los malos por igual, van al mismo lugar, según Eclesiastés 3:20 “Todo va hacia un solo lugar, todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo.”
Leamos también Job 14:2, “Sus hijos tendrán honores, pero él no lo sabrá; O serán humillados, y no entenderá de ello”.
Eclesiastés 9:10, “Todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas; porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo, ni ciencia, ni sabiduría.”
Salmos 146:4, “Pues sale su aliento, y vuelve a la tierra; en ese mismo día perecen sus pensamientos.”
El salmista dice que los muertos no pueden adorar a Dios, están inconscientes, al igual que una persona que duerme no sabe lo que pasa a su alrededor. Los muertos no siguen viviendo “en algún otro lugar”, están totalmente inconscientes.
¿Cuándo recibiremos entonces nuestra recompensa? ¿Cuándo nuestra mortalidad serán cambiada por la inmortalidad?
“He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos, pero todos seremos trasformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta: porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptible, y nosotros seremos trasformados. Por es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria “¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?” (1 Corintios 15:51-55).
“Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte” (1 Corintios 15:26).
Estaremos encantados de darle más versículos bíblicos que nos soliciten.
*Content Image: Eve in Eden - from the Bible & Sacred History/Joe Maniscalco