Las Lecciones del Desierto “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza” (Romanos 15:4).
Lectura adicional:
Testimonios para la Iglesia, tomo 2, págs. 113–121.
“No tenemos nada que temer por el futuro, excepto si nos olvidáramos de la manera en que el Señor nos ha guiado, y de su enseñanza en nuestra historia pasada.” –The General Conference Daily Bulletin, 29 de enero de 1893.
1. HISTORIA Domingo6 de julio
a. ¿Qué costumbre era muy antigua entre el pueblo de Dios cuando sucedían eventos extraordinarios, y por qué? 1 Samuel 7:12; Josué 4:5–7; Malaquías 3:16.“Cada liberación, cada bendición que Dios en lo pasado ha concedido a su pueblo, debiera mantenerse fresca en el recinto de la memoria como una promesa segura de nuevas, más ricas y mayores bendiciones que Él prodigará. Las bendiciones del Señor se adaptan a las necesidades de su pueblo.” –Comentario Bíblico ASD [Comentarios de E. G. de White], tomo 4, pág. 1204.b. ¿Por qué el estudio de la historia es tan importante? Eclesiastés 1:9; Romanos 15:4.“Todas las porciones de la Biblia son inspiradas por Dios y provechosas. Tanta atención merece el Antiguo Testamento como el Nuevo. Al estudiar el Antiguo Testamento hallaremos manantiales vivos que brotan de lugares donde el lector indiferente sólo halla un desierto.” –La Educación, pág. 185.“La obra de Dios en la Tierra presenta, siglo tras siglo, sorprendente analogía en cada gran movimiento reformatorio o religioso. Los principios que rigen el trato de Dios con los hombres son siempre los mismos.” –El Conflicto de los Siglos, pág. 391.
2. ISRAEL EN EL DESIERTO Lunes7 de julio
a. ¿Qué historia bíblica específica representa al pueblo de Dios que se acerca a los últimos días de la historia de la Tierra? 1 Corintios 10:6–15.“La experiencia de los cristianos de estos días es semejante a los viajes del Israel antiguo. Leed 1 Corintios 10, especialmente los versículos 6–15.” –Testimonios para la Iglesia, tomo 1, pág. 256.b. ¿Cómo logró Satanás impedir la entrada de Israel en la Tierra Prometida? ¿Cuál fue su blanco, y cómo es esto una advertencia para nosotros? Hebreos 3:9–12, 16, 17.“Satanás estaba resuelto a seguir dominando la tierra de Canaán, y cuando ella fue hecha morada de los hijos de Israel, y la ley de Dios fue hecha la norma de esa tierra, aborreció a Israel con un odio cruel y maligno, y tramó su destrucción. Por medio de los espíritus malignos, se introdujeron dioses extraños, y a causa de la transgresión, el pueblo escogido fue finalmente echado de la tierra prometida y dispersado.” –Patriarcas y Profetas, págs. 744, 745.“El pecado de incredulidad, por el cual fue destruida su confianza en el Hijo de Dios, alejó a Israel por el mal camino. En el mismo momento cuando debían de haber estado alabando a Dios y magnificando el nombre del Señor, hablando de su bondad, anunciando su poder, fueron hallados en la incredulidad, y llenos de murmuraciones y quejas. El engañador buscó a través de todo medio posible sembrar la discordia entre ellos, crear envidia y odio en sus corazones contra Moisés, y avivar la rebelión contra Dios.” –The Signs of the Times, 25 de abril de 1895.“Algunos están siempre en espera del mal, o agrandan de tal manera las dificultades que realmente existen, que sus ojos se incapacitan para ver las muchas bendiciones que demandan su gratitud. Los obstáculos que encuentran, en vez de guiarlos a buscar la ayuda de Dios, única fuente de fortaleza, los separan de Él, porque despiertan inquietud y quejas.“¿Hacemos bien en ser tan incrédulos? ¿Por qué hemos de ser ingratos y desconfiados? Jesús es nuestro amigo; todo el cielo está interesado en nuestro bienestar, y nuestra ansiedad y temor apesadumbran al Santo Espíritu de Dios. No debemos abandonarnos a la ansiedad que nos irrita y desgasta, y que en nada nos ayuda a soportar las pruebas. No debe darse lugar a esa desconfianza en Dios que nos lleva a hacer de la preparación para las necesidades futuras el objeto principal de la vida, como si nuestra felicidad dependiera de las cosas terrenales.” –Patriarcas y Profetas, pág. 299.
3. UN PUEBLO SEPARADO Martes8 de julio
a. Dado que los principios de Dios son distintos de los principios del mundo, ¿qué requiere Él entre nosotros? Amós 3:3; 2 Corintios 6:14–17; Marcos 14:38.“Nuestra fe santa clama por una separación.” –Joyas de los Testimonios, tomo 1, pág. 82.“Se requiere que los seguidores de Cristo salgan del mundo, y estén separados, y no toquen lo inmundo, para tener la promesa de ser los hijos e hijas del Altísimo, miembros de la familia real. Pero si no cumplen con las condiciones, no puede cumplirse en ellos la promesa.” –Testimonios para la Iglesia, tomo 2, pág. 392.“Hoy procura Satanás repetir esta historia [de que los espíritus malignos introduzcan dioses extraños a fin de hacer que el pueblo de Dios desobedezca]. Dios está apartando a sus hijos de las abominaciones del mundo, para que puedan guardar su ley; y a causa de esto, la ira del ‘acusador de nuestros hermanos’ no tiene límite. . . . La verdadera tierra de promisión está delante de nosotros, y Satanás está resuelto a destruir al pueblo de Dios, y privarlo de su herencia.” –Patriarcas y Profetas, pág. 745.b. ¿Cuál es el resultado de la unión voluntaria con el mundo? Santiago 4:4.“Quienquiera que voluntariamente entabla relaciones tales se verá en la necesidad de amoldarse, hasta cierto grado, a los hábitos y costumbres de sus compañeros. Pasar el tiempo así es peor que malgastarlo. Se despiertan y fomentan pensamientos, y se pronuncian palabras, que tienden a quebrantar los baluartes de los buenos principios y a debilitar la ciudadela del alma.” –Patriarcas y Profetas, pág. 607.“A los padres que viven en las ciudades, el Señor les envía la clamorosa advertencia: Juntad a vuestros hijos en vuestra propia casa; reunidlos para separarlos de los que no prestan atención a los mandamientos de Dios, los que enseñan y practican el mal. Salid de las ciudades tan rápido como sea posible.” –Consejos Sobre el Régimen Alimenticio, pág. 479.c. ¿Qué pregunta deberíamos hacernos? 2 Corintios 13:5.“Cada hijo de Dios tiene el deber de preguntarse: ‘¿En qué me encuentro separado del mundo?’ Experimentemos un poco de inconveniencia y con ello coloquémonos en el lado seguro.” –Testimonios para la Iglesia, tomo 1, pág. 251.
4. EL MAR ROJO MODERNO Miércoles9 de julio
a. ¿Por qué fueron necesarios para Israel los 40 años de peregrinaje por el desierto? Números 32:11–13.“[La mayoría de los israelitas] se habían quejado por nada, y ahora Dios les daba verdaderos motivos de llorar. Si se hubieran lamentado por su pecado cuando les fue presentado fielmente, no se habría pronunciado esta sentencia [de vagar en el desierto durante cuarenta años].” –Patriarcas y Profetas, pág. 413.b. ¿Qué marcó el comienzo del tiempo de prueba de Israel en el desierto, y qué marcó su conclusión? Éxodo 14:21, 22, 29–30; Josué 3:15–17; 4:18. ¿Cómo se asemeja esto a la historia de los creyentes del Adviento?“La historia del antiguo Israel es un ejemplo patente de lo que experimentaron los adventistas. Dios dirigió a su pueblo en el movimiento adventista, así como sacó a los israelitas de Egipto. Cuando el gran desengaño, su fe fue probada como lo fue la de los hebreos cerca del Mar Rojo. Si hubiesen seguido confiando en la mano que los había guiado y que había estado con ellos hasta entonces, habrían visto la salvación de Dios. Si todos los que habían trabajado unidos en la obra de 1844 hubiesen recibido el mensaje del tercer ángel, y lo hubiesen proclamado en el poder del Espíritu Santo, el Señor habría actuado poderosamente por los esfuerzos de ellos. Raudales de luz habrían sido derramados sobre el mundo. Años haría que los habitantes de la tierra habrían sido avisados, la obra final se habría consumado, y Cristo habría venido para redimir a su pueblo.“No era voluntad de Dios que Israel peregrinase durante cuarenta años en el desierto; lo que Él quería era conducirlo a la tierra de Canaán y establecerlo allí como pueblo santo y feliz. Pero ‘no pudieron entrar a causa de incredulidad’ (Hebreos 3:19). Perecieron en el desierto a causa de su apostasía, y otros fueron suscitados para entrar en la tierra prometida. Asimismo, no era la voluntad de Dios que la venida de Cristo se dilatara tanto, y que su pueblo permaneciese por tantos años en este mundo de pecado e infortunio. Pero la incredulidad lo separó de Dios. Como se negara a hacer la obra que le había señalado, otros fueron los llamados para proclamar el mensaje. Por misericordia para con el mundo, Jesús difiere su venida para que los pecadores tengan oportunidad de oír el aviso y de encontrar amparo en Él antes que se desate la ira de Dios.” –El Conflicto de los Siglos, pág. 511.
5. PRUEBAS SIMILARES Jueves10 de julio
a. ¿Qué clase de problemas enfrentará el pueblo de Dios en estos últimos días? Números 11:4; 1 Corintios 10:6.“No era la voluntad de Dios que se demorara así la venida de Cristo. Dios no tenía el propósito de que su pueblo, Israel, vagara cuarenta años por el desierto. Prometió guiarlos directamente a la tierra de Canaán, y establecerlos allí como un pueblo santo, sano y feliz. Pero aquellos a quienes primero se les predicó, no entraron ‘a causa de incredulidad’ (Hebreos 3:19). Sus corazones estaban llenos de murmuración, rebelión y odio, y Dios no pudo cumplir su pacto con ellos.“Durante cuarenta años, la incredulidad, la murmuración y la rebelión impidieron la entrada del antiguo Israel en la tierra de Canaán. Los mismos pecados han demorado la entrada del moderno Israel en la Canaán celestial. En ninguno de los dos casos faltaron las promesas de Dios. La incredulidad, la mundanalidad, la falta de consagración y las contiendas entre el profeso pueblo de Dios nos han mantenido en este mundo de pecado y tristeza tantos años.” –El Evangelismo, págs. 504, 505.b. El deseo fue el problema que los israelitas enfrentaron en el desierto (1 Corintios 10:6). En este contexto, ¿qué deseo estaremos enfrentando en nuestro tiempo? Filipenses 3:19; 1 Samuel 15:23.“Cuando Dios sacó a los hijos de Israel de Egipto, era su propósito establecerlos en la tierra de Canaán, para que constituyeran un pueblo puro, feliz y lleno de salud. Consideremos los medios por los cuales Él quería realizar esto. Los sometió a un sistema de disciplina que, si lo hubieran seguido alegremente, habría resultado para el bien, tanto de ellos mismos como de su posteridad. Quitó la carne de su alimentación en gran medida. Les había concedido carne en respuesta a sus clamores, precisamente antes de llegar al Sinaí, pero fue provista solamente por un día. Dios podría haber provisto carne tan fácilmente como maná, pero impuso al pueblo una restricción para su bien. Era el propósito de Dios proveerles un alimento más adecuado a sus necesidades que el régimen afiebrante al cual muchos de ellos habían estado acostumbrados en Egipto. El apetito pervertido debía ser reducido a un estado más saludable, para que pudieran disfrutar de los alimentos provistos originalmente para el hombre: las frutas de la tierra, que Dios les dio a Adán y Eva en el Edén.” –Consejos Sobre el Régimen Alimenticio, pág. 451.“Con la historia de los hijos de Israel ante nosotros, prestemos atención, y no seamos hallados cometiendo los mismos pecados, siguiendo en el mismo camino de incredulidad y rebelión.” –The Review and Herald, 18 de abril de 1893.
PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL Viernes11 de julio
1. ¿Cómo el estudio de la historia puede ser de gran valor para nosotros?2. ¿Qué historia bíblica se cita como un símbolo para la iglesia de Dios en los últimos días?3. ¿Cómo la asociación voluntaria con los incrédulos afecta a los creyentes?4. ¿Qué evento en la historia del Israel moderno es comparado con el cruce del Mar Rojo?5. ¿Cuáles son los pecados que retardan la segunda venida de Cristo?“No fueron las enseñanzas de las escuelas de Egipto lo que habilitó a Moisés para triunfar sobre sus enemigos, sino su fe constante e inquebrantable, una fe que no vacilaba bajo las circunstancias más penosas. A la orden de Dios, Moisés avanzaba, aunque aparentemente no había nada sobre qué asentar los pies. Más de un millón de personas dependían de él, y las condujo hacia delante paso a paso, día tras día. Dios permitió estas peregrinaciones solitarias por el desierto para que sus hijos pudiesen obtener experiencia en soportar las penurias, para que cuando estuvieran en peligro supieran que sólo en Dios hay alivio y liberación. Así podrían aprender a conocerlo y confiar en Él, y servirle con fe viva.” –Consejos para los Maestros, Padres y Alumnos, pág. 394.“Las tentaciones llegarán bajo el disfraz más seductor, pero es un riesgo dejar la sencilla orden de Dios para seguir las afirmaciones de los hombres. Seguir la palabra del Señor, aceptar la verdad, involucra llevar una cruz y ser abnegados; pero no es seguro hacer otra cosa que llevar la cruz. A medida que veamos la luz, caminemos en la luz. Que un solemne e inalterable propósito tome posesión de nosotros, y resolvamos en la fuerza y gracia de Dios que de aquí en adelante viviremos para Él, y que ninguna consideración terrenal nos persuadirá para rechazar la divina ley de los diez mandamientos, rechazando así a nuestro Salvador y nuestro Dios. Busquemos consejo de Dios, y encontraremos que el camino de la obediencia a sus mandamientos es el camino del justo, ‘que va en aumento hasta que el día es perfecto’ (Proverbios 4:18).“El primer paso en el camino de la obediencia es someterse la voluntad a Dios. Esto puede parecer algo difícil de hacer; porque Satanás presentará toda objeción posible, y creará dificultades, magnificando las perplejidades delante de la mente; pero demos el primer paso, y el siguiente paso en la escalera del progreso será más fácil. La escalera del progreso debe ser subida escalón tras escalón; porque Dios está en la cima de la escalera, y su gloria iluminará cada paso que avancemos. El camino de la fe y la abnegación es un camino ascendente; su sendero es hacia el cielo, y a medida que avancemos, las nubes engañosas de la duda y del mal quedarán atrás.” –The Review and Herald, 9 de octubre de 1894.