Donde Comienza la Reforma “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne” (Ezequiel 36:26).
Lectura adicional:
Consejos Sobre el Régimen Alimenticio, págs. 15–31.
“Los reavivamientos producían en muchos profundo recogimiento y humildad. Eran caracterizados por llamamientos solemnes y fervientes hechos a los pecadores, por una ferviente compasión hacia aquellos a quienes Jesús compró por su sangre. Hombres y mujeres oraban y luchaban con Dios para conseguir la salvación de las almas.”—El Conflicto de los Siglos, pág. 515.
1. AUTOEXAMEN Domingo7 de febrero
a. ¿Cuál debe ser nuestra primera labor al comenzar una reforma espiritual? 2 Corintios 13:5; Romanos 8:10.“La reforma verdadera empieza con la purificación del alma. La obra en pro de los caídos sólo conseguirá verdadero éxito cuando la gracia de Cristo reforme el carácter, y el alma se ponga en relación viva con Dios.”—El Ministerio de Curación, pág. 135.b. ¿Qué fuerza interior es esencial para llevar a cabo una reforma exterior? Tito 3:5; Ezequiel 36:26, 27.“Es la queda vocecita del Espíritu de Dios la que tiene poder para cambiar el corazón.”—Profetas y Reyes, pág. 124.“El plan de comenzar afuera y tratar de obrar hacia el interior siempre ha fracasado, y siempre fracasará. El plan de Dios con Ud. es comenzar con la raíz misma de todas las dificultades, el corazón, y entonces del corazón mismo surgirán los principios de justicia. La reforma será exterior así como interior.”—Consejos Sobre el Régimen Alimenticio, pág. 40.
2. CONTEMPLANDO A CRISTO Lunes8 de febrero
a. ¿Qué podemos notar en el ejemplo de Cristo? Hebreos 12:2; 1 Pedro 2:21–23.“La ley condena todo pecado y requiere toda virtud. Demanda del hombre un aspecto externo, y requiere la pureza del alma. ‘He aquí,’ escribe el salmista, ‘tú amas la verdad en lo íntimo, y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría’ (Salmo 51:6). La ley fue ejemplificada en la vida de Cristo. Él es un modelo para toda la humanidad. Vivió la ley. Su pureza y benevolencia, su devoción a la verdad, y su celo por la gloria de Dios revelan la perfección de la ley. Cada acto suyo fue una revelación de la gloria del Padre. Fue todo lo que la ley requería que fuera.”—The Review and Herald, 26 de febrero de 1901.“Cristo llevó una vida de perfecta obediencia a la ley de Dios, y así dio ejemplo a todo ser humano. La vida que él llevó en este mundo, tenemos que llevarla nosotros por medio de su poder y bajo su instrucción.”—El Ministerio de Curación, pág. 135.b. ¿De qué modo nos transforma la contemplación? 2 Corintios 3:18; Salmo 119:11.“Al contemplar a Cristo, nos transformamos. Si la mente se espacia en forma constante en las cosas temporales, éstas llegan a absorberlo todo y afectan al carácter, de modo que la gloria de Dios se pierde de vista y se olvida. Las oportunidades que están al alcance de ellos para llegar a ser versados en las cosas celestiales, se pasan por alto. Muere la vida espiritual.”—Hijos e Hijas de Dios, pág. 107.“A fin de dar un mensaje como el que dio Juan, debemos tener una experiencia espiritual como la suya. Debe hacerse la misma obra en nosotros. Debemos contemplar a Dios, y al contemplarlo, perdernos a nosotros mismos de vista.”—Obreros Evangélicos, pág. 57.“El corazón que ha sido ocupado previamente con la palabra de Dios está fortificado contra Satanás. Los que hacen de Cristo su compañero diario e íntimo amigo sentirán que los rodean los poderes de un mundo invisible. Al mirar a Jesús se asemejarán a su imagen. Al contemplarle son cambiados según el modelo divino; su carácter se suaviza, se refina y se ennoblece para el reino celestial.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 4, pág. 609.
3. DEJANDO DE LADO EL YO Martes9 de febrero
a. Cuando vemos que es necesaria una reforma, ¿cuál debe ser el primer paso a tomar? Marcos 8:34; 2 Corintios 10:5.“La enseñanza de Juan despertó en los corazones de muchos un gran deseo de tener una porción de las bendiciones que Cristo iba a traer, y recibieron la verdad.... Nada excepto un deseo vehemente, una voluntad decidida, una firmeza de propósito, podría resistir a las tinieblas morales que cubrían la tierra como una mortaja. A fin de obtener las bendiciones que era su privilegio tener, debían obrar con fervor, debían negar el yo.”—The Youth’s Instructor, 17 de mayo de 1900.“Cuando el Espíritu de Dios conmueve el alma con su maravilloso poder de despertarla, humilla el orgullo humano. El placer mundanal, la jerarquía y el poder son tenidos por inútiles.... Entonces la humildad y el amor abnegado, tan poco apreciados entre los hombres, son ensalzados como las únicas cosas de valor. Tal es la obra del Evangelio, de la cual el mensaje de Juan era una parte.”—El Deseado de Todas las Gentes, pág. 108.b. ¿Cuán extensa es la obra de renuncia al yo? Filipenses 1:21; 2 Corintios 5:14, 15; Juan 3:30.“Mirando con fe al Redentor, Juan se había elevado a la altura de la abnegación. Él no trataba de atraer a los hombres a sí mismo, sino de elevar sus pensamientos siempre más alto, hasta que reposasen en el Cordero de Dios. Él no había sido más que una voz, un clamor en el desierto. Ahora aceptaba con gozo el silencio y la oscuridad, a fin de que los ojos de todos pudiesen dirigirse hacia la Luz de la vida.”—Obreros Evangélicos, págs. 57, 58.c. ¿Cuál debe ser la actitud de un verdadero mensajero de Dios? Romanos 14:7, 8; Gálatas 2:20.“Aquellos que sean fieles a su vocación como mensajeros de Dios, no tratarán de honrarse a sí mismos. El amor al yo será absorbido por el amor a Cristo. Reconocerán que su obra es proclamar, como proclamó Juan el Bautista: ‘He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo’ (Juan 1:29).”—Ídem.
4. TEMPERANCIA Y COMPROMISO Miércoles10 de febrero
a. ¿Cómo el régimen alimenticio ayuda para una obra más eficaz? 1 Corintios 9:25–27. ¿Cuándo y dónde debe ser aplicada esta obra? Filipenses 2:5; 2 Pedro 1:5–8.“A fin de ser completamente exitosa, la gran obra de reforma de la temperancia debe comenzar en el hogar.”—The Review and Herald, 23 de agosto de 1877.“La luz de la reforma pro salud se abre ante el pueblo de Dios ahora, para que vean la necesidad de mantener sus apetitos y pasiones bajo el control de las facultades superiores de la mente. Esto es además necesario, a fin de que tengan la fuerza y la agudeza mental para discernir el sagrado conjunto de verdades y desviarse de los hechizantes errores y las agradables fábulas que inundan el mundo.”—The Spirit of Prophecy, tomo 2, pág. 44.“Las pasiones y los apetitos deben ser mantenidos sujetos a las facultades superiores de la mente. Esta disciplina propia es esencial para la fuerza mental y la percepción espiritual que nos han de habilitar para comprender y practicar las sagradas verdades de la Palabra de Dios. Por esta razón, la temperancia ocupa un lugar en la obra de prepararnos para la segunda venida de Cristo.”—El Deseado de Todas las Gentes, pág. 76.b. ¿Cómo deberíamos animar a la juventud a controlar sus pensamientos? Romanos 12:2; 1 Pedro 1:13.“Cada uno de nosotros tenemos una obra individual que hacer, ciñendo los lomos de nuestro entendimiento, siendo sobrios, velando en oración. La mente debe ser firmemente controlada para espaciarse en temas que fortalecerán las facultades morales. La juventud debe comenzar pronto a cultivar hábitos correctos de pensamiento. Debemos disciplinar la mente para pensar en una dirección saludable y no permitirle detenerse en cosas que son malas. El salmista exclama: ‘Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, oh Jehová, roca mía, y redentor mío’ (Salmo 19:14). A medida que Dios obra en el corazón mediante su Espíritu Santo, el hombre debe cooperar con él. Los pensamientos deben ser limitados, restringidos, alejándose de la divergencia y contemplación de cosas que sólo debilitan y contaminan el alma. Los pensamientos deben ser puros, las meditaciones del corazón deben ser limpias, si queremos que las palabras de la boca sean palabras aceptables para el cielo y provechosas para nuestros compañeros.”—The Review and Herald, 12 de junio de 1888.
5. HUMILDAD EN EL MINISTERIO Jueves11 de febrero
a. ¿Qué debemos comprender a fin de tener éxito en ganar almas para Cristo? Lucas 14:8–11; Juan 3:30.“Antes de la honra viene la humildad. Para ocupar un lugar elevado ante los hombres, el Cielo elige al obrero que como Juan el Bautista, toma un lugar humilde delante de Dios. El discípulo que más se asemeja a un niño es el más eficiente en la labor para Dios. Los seres celestiales pueden cooperar con aquel que no trata de ensalzarse a sí mismo sino de salvar almas. El que siente más profundamente su necesidad de la ayuda divina la pedirá; y el Espíritu Santo le dará vislumbres de Jesús que fortalecerán y elevarán su alma. Saldrá de la comunión con Cristo para trabajar en favor de aquellos que perecen en sus pecados. Fue ungido para su misión, y tiene éxito donde muchos de los sabios e intelectualmente preparados fracasarían.”—El Deseado de Todas las Gentes, págs. 403, 404.b. ¿Qué es necesario en la iglesia hoy? 1 Pedro 5:5, 6.“El ministro y la iglesia carecen tristemente de la preciosa gracia de la humildad. Los hombres que predican la verdad tienen en demasiada estima sus propias capacidades. La verdadera humildad llevará al hombre a exaltar a Cristo y la verdad y a darse cuenta de su total dependencia del Dios de verdad. Aprender lecciones de humildad es doloroso, aunque del máximo provecho, al fin y al cabo. El dolor que causan las lecciones de humildad es la consecuencia de nuestro enorgullecimiento por causa de una falsa valoración de nosotros mismos, de manera que somos incapaces de ver nuestra enorme necesidad.”—Testimonios para la Iglesia, tomo 4, págs. 371, 372.
PREGUNTAS DE REPASO PERSONAL Viernes12 de febrero
1. ¿Qué significa cambiar de corazón, y cómo podemos realizar este cambio?2. ¿Cómo podemos seguir el ejemplo de Jesús en una vida de obediencia perfecta a la ley de Dios?3. ¿Qué sucede cuando el Espíritu de Dios toca el alma?4. ¿Cómo podemos controlar nuestros pensamientos, y cómo esto afectará a nuestras palabras?5. ¿De qué forma nos ayuda la humildad en nuestro ministerio hacia los demás?